La oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) aumentó la captura de personas en la frontera en un 32% en 2018 con respecto a 2017 y la oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) tiene sobrecupo en su centros de retención de inmigrantes que esperan una audiencia en cortes o están a punto de ser deportados.
A partir del inicio de este año, más de 48,000 personas se encuentran bajo la custodia de ICE, superando las 40,520 camas para las cuales recibió financiamiento, reportó CNN.
En el año fiscal 2018, ICE tuvo un promedio de más de 42,000 personas bajo custodia, lo que rompió el récord de 2017, cuando había 38,000 inmigrantes en promedio.
Según la oficina del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), la mayoría de los arrestados tenían condenas penales –incluso faltas a leyes migratorias–, cargos penales pendientes, u órdenes de deportación definitivas emitidas con anterioridad.
Estas cifras son distintas a las de la Patrulla Fronteriza, de inmigrantes que piden asilo y son retenidos o aquellos que ingresaron como indocumentados y fueron capturados cerca de la frontera con México.
Estas acciones tienen su origen en las políticas del presidente Donald Trump contra inmigrantes, particularmente enfocados en las caravanas de centroamericanos, uno de sus principales argumentos para construir el muro.
